Como Sobrevivir a la Temida Etapa de los 2 Años Consejos

La etapa de los dos años de los niños para muchas familias es un cambio radical en su desarrollo, principalmente en su forma de ser, tanto que se ha escuchado a muchos padres o profesionales del tema llamando a esta etapa: “Los terribles dos años”. 

¿Por qué la llaman así?

En esta edad, el bebé comienza a adquirir autonomía, están auto descubriéndose y tomando conciencia de ellos mismos y sus capacidades, de pronto se tiran a mitad de la calle a llorar y gritar por motivo que quizás no entiendes o no sabes cómo solucionar y en su vocabulario se ha instalado la palabra ‘no’. Es una etapa clave porque se descubren como personas independientes, pero a la vez, se están dando cuenta de que pertenecen a un grupo llamado familia. 

¿De qué se trata esta etapa?  

Para muchos puede ser caótica, pero también es una edad en la que esas pequeñas personitas llenas de amor, son divertidas y ocurrentes. Su creatividad y formas ingeniosas de solucionar sus problemas o vencer obstáculos, es sorprendente. Por ejemplo, si necesitan alcanzar algo que está muy alto, no dudarán en buscar la forma de hacerlo. 

Esto demuestra también su perseverancia, ya que cuando quieren algo, no paran hasta conseguirlo. Lo intentan una y otra vez, aunque a veces, les gana la frustración. Comienzan a ser más conscientes de sus emociones, aunque no sepan qué es exactamente lo que son y las expresan tal y como las sienten, aunque no las entiendan ni sepan de dónde vienen.

¿Qué hacer para vivir con los terribles dos años y no morir en el intento?  

Lo más difícil son los famosos berrinches por motivos que los adultos quizás no entendemos al instante y consideramos exageradas. Sin embargo, en la mente de un niño de dos años, tiene todo el sentido del mundo, porque es su forma de expresar y sacar lo que siente.  

Hay cinco aspectos indispensables que los papás deben tener en cuenta: 

Paciencia, paciencia y… más paciencia. 

Sabemos que suena fácil, pero para muchos papás no lo es.

Lo primero y más importante es respirar y recordar que esto es solo una etapa y solo será un recuerdo. Es mejor aprovechar este tiempo y quedarse con todo lo bueno y divertido que tienen los niños en esta edad. 

Interpretar su comportamiento

Cuando los niños están cansados, tienen hambre o mucho sueño, suelen ser más irritables y, por lo tanto, es probable que se presenten rabietas. 

Respetar sus tiempos

Cada niño tiene sus formas y tiempos para hacer sus cosas y si se intenta entender y respetar esto, es probable que los berrinches disminuyan o no sean tan frecuentes. 

Establecer rutinas 

Seguir una rutina conociendo sus necesidades y preferencias les da seguridad y orden que tanto necesitan durante esta etapa. 

Respetar su autonomía

Es importante que los niños puedan “Ser”, permitiéndoles intentar hacer las cosas por ellos mismos, por supuesto dentro de los límites que cada familia establezca para su seguridad. 

Recuerda que esto es una guía y apoyo para ti en esta etapa que seguramente no va a desaparecer al instante, pero sin duda vas a encontrar la forma de atravesarlo con tu pequeño.

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